El
Dios verdadero, el Dios vivo.
Lee hoy: Jeremías 10: 1-16
Reflexión:
El
Dios vivo y verdadero demanda de nosotros fidelidad (la cual se
conecta con la verdadera fe) en vez de una tergiversada “piedad”
que necesita satisfacer el materialismo del alma vacía de Dios, la
cual siempre quiere tocar algo, ver algo o recibir garantías
sensorialmente tangibles de La Palabra de Dios.
Las
culturas históricamente paganas abundaron en imágenes (estatuas,
figuras, amuletos, etc) y dioses que “satisfacían” un sinnúmero
de necesidades de las personas que les rendían culto. Dios en el
texto de Jeremías es claro advirtiendo a Su pueblo que no aprenda de
las otras naciones esta fe paganizada, que no tema a las señales del
cielo (astrología y ocultismo) y que no rinda culto a las estatuas
que son bien adornadas con oro y plata; y vestidas con telas moradas
y rojas. No hay pretextos filosóficos que justifiquen cualquier
manifestación de idolatría. Dios es uno y Su pueblo uno. Su
espíritu mora en cada uno de sus hijos redimidos por Cristo y eso es
sagrado, mas glorioso y poderoso que cualquier objeto, persona,
imagen o cosa que brinde falsa sensación de seguridad a las almas
paganizadas que no se han dejado llenar de la vida de Dios por medio
de Jesucristo.
El
Dios Eterno (YHWH: Yahvé o Jehová) no comparte Su gloria con nada
ni con nadie. El nos ha dejado en La Biblia principios espirituales
muy claros sobre la verdadera FE del reino de Dios. El cumplimiento
de estos principios es imprescindible por parte de Su pueblo para que
se cumpla lo que Jesús nos enseñó para orar adecuadamente: “Venga
tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la
tierra. ”.
Así
que si en verdad naciste de nuevo y crees que eres hijo de Dios:
No
rindas culto a imágenes, estatuas ni objetos “sagrados”
“Yo Jehová; este es
mi nombre; y a otro no daré mi gloria, ni mi alabanza a esculturas”
Isaías 42: 8
No
rindas culto a los ángeles ni participes en ceremonias donde ellos
son benerados
“Y el ángel me dijo:
Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas
del Cordero. Y me dijo: Estas son palabras verdaderas de Dios.
Yo me
postré a sus pies para adorarle. Y él me dijo: Mira, no lo hagas;
yo soy consiervo tuyo, y de tus hermanos que retienen el testimonio
de Jesús. Adora a Dios;
porque el testimonio de Jesús es el
espíritu de la profecía.”
Apocalípsis
19: 9-10
No
intentes representar a Dios ni nada supuestamente "divino o santo"
por
medio de estatuas
“¿A quién me asemejáis, y me igualáis, y me comparáis, para
que seamos semejantes? Sacan oro de la bolsa, y pesan plata con
balanzas, alquilan un platero para hacer un dios de ello; se postran
y adoran. Se lo echan sobre los hombros, lo llevan, y lo colocan en
su lugar; allí se está, y no se mueve de su sitio. Le gritan, y
tampoco responde, ni libra de la tribulación.”
Isaías
46: 5-7
No
hagas representación de mujeres ni hombres “santos”
con el
pretexto de rendir culto a Dios
“Guardad, pues, mucho
vuestras almas; pues ninguna figura visteis el día que Jehová habló
con vosotros de en medio del fuego; para que no os corrompáis y
hagáis para vosotros escultura, imagen de figura
alguna, efigie de varón o hembra.”
Deuteronomio
4: 15-16
No
practiques rituales místicos que invoquen el sol, la luna y los
astros.
Rechaza el horóscopo y la carta astral
“Y quitó a los
sacerdotes idólatras que habían puesto los reyes de Judá para que
quemasen incienso en los lugares altos en las ciudades de Judá, y en
los alrededores de Jerusalén; y asimismo a los que
quemaban incienso a Baal, al sol y a la luna,
y a los signos del
zodíaco, y a todo el ejército de los cielos.”
2
Reyes 23: 5
Pr Alejandro Gil Sánchez