Páginas

lunes, 27 de abril de 2015

Escuchando a otros honramos al Señor.

Saludos para todos y un abrazo fraterno.

Ser escuchados es una de las necesidades mas sentidas en la sociedad. Muchos problemas relacionales entre amigos, esposos, padres e hijos, socios de empresas, etc; parten de una mala actitud frente al otro cuando de escuchar se trata. En este pasaje Job está reclamando un espacio que es vital para su bienestar: tiempo para ser escuchado y que pueda hablar hasta el final, exponer claramente su defensa ante las conjeturas de sus amigos y "respirar algo de justicia". Es sumamente ofensivo y desalentador el hecho de cortar las palabras a quien reclama ser escuchado. Y no sólo me refiero a los espacios para uno presentar defensa frente a un juicio, sino también para aportar ideas, expresar sentimientos, compartir anécdotas y demás. Demos de lo que hemos recibido. Dios nos buscó para salvarnos por gracia, nos escucha todas las veces que nos acercamos a El y atiende a nuestras oraciones. ¿Quienes somos nosotros para negar este privilegio a otros? 

"Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas."      Mateo 7:12

Pr Alejandro Gil Sánchez